donde el campo va a conurbar
con su infinito horizonte
junto al río que se esconde
descansan las maravillas
del "dichoso aquel"
Entre flores y hortensias
donde respiré hoy
son ahora acurrucados por el viento
los gritos y las risas
que pronuncié hoy
Que el sonido del río
refleje la luz del sol
uno nuevo que viven las aves
y que aran con su voz
Sol que cumple los deseos
permite descansar
a los brazos que aún extensos
puedes encontrar.
Bajo su ocre esmalte
y la sombra de su luz
reposa el andante
tras la obra, tras su cruz.
Que rían de nuevo los niños
permitanme escuchar su voz
que como el canto de las aves
hoy rellena mi corazón.
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