Como Rómulo y Remo a Roma
edificaron en leyenda y verdad
ahora quiero con nueva causa
edificar mi nueva realidad
Gracias por cada caricia
beso, palabra y razón
porque nunca olvidaré
cuanto te amé
en el corazón
Gracias por los días
las tardes y las que quisimos
hacer noche
por los pasos, las caídas
y las heridas con que aprendimos
cada vez
nunca olvides, que nunca
te olvidaré.
Tranquilidad que asecha
y ahora ataca, lo busqué
la fría mano de la soledad
toca mi hombro, acompañada
por un beso de sanidad
que ahora trae mi alma
la tan ansiada paz.
No quiero sembrar más ilusiones
donde ahora maduran los hechos
que sea tuyo el basto campo
de los pensamientos e impresiones
para que busques
como yo lo haré
la compleja felicidad
de nuestra
la inmarcesible realidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario