miércoles, 6 de septiembre de 2017

Despedida

Perdón por no escribirte antes
por las caricias que no te di
por las veces que ignore amarte

Porque no liberé de tu espalda
la correa invisible que te ataba a nuestra esquina
encajada en un mar pereza 
justificaba mi desdén a tu necesidad casi equina 

Me acompañaste en catorce de veintiuno 
y en menos de doce te vi dormir 
tu alegría en mi siempre intervino
felicidad dejabas impresa con tu ardid 
por una galleta un mundo
y por verte partir un nudo

Te amé, oh como te amé 
más de lo que pensaba 
que nitrógeno seas hoy
que una flor seas mañana.


No hay comentarios:

Publicar un comentario